Aunque muy desconocida, en Abelenda, concello de Avión, tenemos una de las más grandes cascadas de Galicia. Se trata de la Fervenza da Feixa, formada por el pequeño Regueiro das Fragas.
Eso sí, al tratarse de un pequeño regato, si queréis verla en su máximo esplendor deberéis ir en épocas de lluvias, así os aseguráis el espectáculo. De todas formas, el sendero que nos llevará hasta la cascada de A Feixa no tiene desperdicio y cualquier época del año es buena para recorrerlo.
Existen varias alternativas para llegar hasta la Fervenza da Feixa. Nosotros hemos elegido el sendero que sale desde las inmediaciones del tanatorio de Abelenda, muy cerquita de Mouriscados, en donde el río cruza la carretera. Allí el río se convierte ya en el Regueiro de Riobó y al comienzo veremos una antigua pontella de piedra que cruza el río. No tenemos más que ascender dejándonos llevar por el sendero.
Pronto podremos ver pequeñas cascadas como anticipo del gran salto de agua. Podemos visitar los molinos que recibían el agua por un canal desde los pies del gran salto de agua, uno de ellos rehabilitado.
No hay mucho más de 500 metros de recorrido, aunque todo será subida. Junto a los pies de la cascada tendremos un área recreativa y un mirador con unas hermosas vistas. Desde allí podremos ver el Alto do Castro de San Vicenzo e incluso la inconfundible silueta de Pena Corneira.
Aunque no sea un salto vertical, la cascada de A Feixa desciende vertiginosamente sobre la pared rocosa salvando un desnivel de 100 metros en un escaso tramo de 90 metros. El salto principal tendrá más de 40 metros, una maravilla.
Por supuesto que volveremos a esta maravillosa cascada situada en Abelenda, en el concello de Avión.