El concello de Baltar se localiza en el sur de Ourense, en A Limia, limitando ya con Portugal. Es por ello que su historia va de la mano de los devenires de la llamada «raia seca». Desde el comercio o la amistad con Portugal, hasta el contrabando y los enfrentamientos de ambos países, todo hace que esta parte de Galicia adopte una singularidad histórica que solo entienden los que aquí han nacido y crecido.
Este lugar tan relacionado con ambos países, se esconde bajo una joven pero densa carballeira, en las estribaciones de A Serra do Larouco, a tan solo 1,5 km de la frontera con Portugal, en una ladera del valle que forma el Regato da Rousía o de Os Campelos.
De este lugar no queda mucho, tan solo los arranques de los muros que formaban las casas pertenecientes a una gran aldea, la Aldea da Rousía, catalogada como yacimiento GA32005001. También podremos ver sus barrios y sus calles, a veces marcadas con piedras a modo de marcos. En algunos podremos ver incluso cruces grabadas.
En el lado norte, en el Outeiro da Santa, existió una capilla dedicada a Santa Isabel, en donde apareció una talla de una Virgen que hoy se guarda en la iglesia de la vecina localidad de Montecelo.
Muy cerca, en el conocido como Camiño do Contrabando, encontraremos a Fonte da Fame, un lugar en donde se cerraban los tratos relacionados con el contrabando entre gallegos y portugueses.
Sobre su cronología nosotros no sabemos mucho. Dicen que el registro de una boda en la vecina iglesia de Boullosa da cuenta de la existencia de la aldea de A Rousía en el año 1864. En otros lugares hemos constatado la existencia de A Rousía ya en el siglo XVI, aunque no sabemos si como aldea o simplemente como lugar.
Realmente los paneles interpretativos no dicen nada sobre su cronología, pero a la vista de los restos que se conservan, no parecen ser muy modernos precisamente.
Tampoco sabemos nada seguro sobre el abandono y final de la Aldea da Rousía. Por un lado algunos cuentan que fue una plaga de hormigas la que provocó el abandono, caso similar a otros en Galicia, como el de la antigua aldea de A Graña, en Covelo.
Otras versiones dicen que fue un incendio el que calcinó la aldea y otras la posibles rivalidades con la aldea lusa de Vilar de Perdices. No muy lejos, tenemos los restos de la aldea medieval de A Pena, en Rubiás, también en una posición geográfica próxima a la frontera con Portugal. El final de esta aldea también fue un incendio y la posible rivalidad con otra aldea.
Dicen también, que del gran incendio solo sobrevivieron tres mujeres, de las que dos se fueron para Baltar y otra para Boullosa, quedando repartido el monte entre estas dos parroquias.
Cómo llegar
Existe una ruta de senderismo que nos acercará hasta la aldea de A Rousía. Aproximadamente, la senda tiene unos siete kilómetros.
Nosotros hemos hecho trampa y hemos partido desde un camino junto a la carretera. Este camino desciende hasta el valle del Rego da Rousía, pasando junto al yacimiento castrexo de O Castriño. Ascendemos el valle y a unos 600 metros encontraremos la desviación que nos hará pasar sobre el Regato dos Carballos hasta llegar a la Aldea da Rousía.
Si seguimos la OU-1109 hacia el sur llegaremos a Portugal y a unos 8 kilómetros de la frontera, podremos admirar la localidad lusa de Montealegre y su espectacular castillo.