Los Baños de San Xusto se localizan en el margen izquierdo del río Lérez, a escasos metros de la orilla y en el concello de Cerdedo-Cotobade y en la parroquia de San Xurxo de Sacos. Las aguas termales fueron utilizadas por los vecinos de la zona desde tiempos inmemoriales ya que en el lugar brotaban varias surgencias de este agua mineral. En la actualidad en lugar ha cambiado bastante respeto a las fotos de este artículo, pues ha sido construido un moderno balneario sobre las bases del antiguo. Así mismo se ha acondicionado el entorno inmediato a la surgencia.
A mediados del XIX el concello de Cotobade construyó tres pilones de piedra que se ubicaron a la intemperie y que llegaron a satisfacer la demanda de 400 agüistas por año. Por Real Orden del 18 de Julio de 1889 se otorga a los vecinos de Cotobade el derecho de tomar gratuitamente las aguas pagando únicamente un arbitrio municipal previamente acordado.
Al comienzo del siglo XX los vecinos a través de una colecta consiguieron reunir dinero que junto con las 2000 pesetas aportadas por la Diputación permitieron efectuar obras de mejora como la construcción de un muro de 4 metros de alto para la separación de los baños del río, reunir los caudales en una sola fuente para su posterior conducción a un nuevo depósito y la edificación de una caseta con pilas para baños. También se acordó que uno de los médicos municipales fijara su residencia en San Xurxo de Sacos para atender las demandas de los agüistas.
En el lugar se mantienen en pie los restos del primitivo gran balneario en forma de una gran edificación de dos plantas junto al río que se construyó en el año 1914. El edificio se mantuvo en servicio hasta el año 1934, cuando comenzó el decaimiento del auge de los baños que en Galicia alcanzó su máxima expresión durante el cambio de siglo. Hoy existe otra caseta cercana, sobre el malecón y junto al depósito y que contiene 5 duchas.
Cerca de estas edificaciones existe otra mucho más antigua que podría estar relacionado con la primera construcción en relación con las aguas termales. Sobre el cauce del río Lérez y en el lugar donde emanan las surgencias se aprecia la colocación de piedras y rocas con el fin de embalsar en medida de lo posible las aguas para su uso sobre el río. Podremos apreciar las surgencias si vemos el característico color blanco y su peculiar olor de este tipo de aguas mineralizadas. Las aguas minerales normalmente non nacen en el subsuelo sino que se trata de filtraciones desde lo alto de un valle y que en su descenso atraviesan zonas de alta concentración de minerales diversos que confieren sus características.
Estas aguas de San Xusto son de mineralización muy débil, bicarbonatadas sódicas, fluoruradas, sulfuradas y con una implicación termal de 21º. Las propiedades atribuidas a estas aguas son las relacionadas con enfermedades de la piel, hígado, reuma y artritis.
Junto al río también podemos ver los restos de varios molinos de finales del siglo XIX, que junto al balneario, nos da una idea de lo movido que tenía que ser este lugar por aquellas épocas.
Muy cerca se encuentra la Carballeira y Capilla de San Xusto, en donde también existen diversas surgencias.
Precioso lugar está súper
Cuando abrís al publico
Nunca por lo visto es otro de esos típicos dispendios de dinero público reforman algo no lo abren y por estar apartado y desprotegido terminará siendo expoliado y saqueado fui un sábado en junio de 2022 y me lo encontré cerrado además canta a leguas que carece de suministro eléctrico y a pesar de que dice contar con seguridad y vídeo vigilancia es una falacia sin corriente eso no funciona el lugar es bello y la reforma se aprecia con buen criterio y gusto pero me temo lo dicho que será infrausado y saqueado
Hemos intentado ir hoy, pero nos hemos perdido y no lo hemos visto, es difícil elegir cuál es el camino, no hay sañalización y el camino no es apto para mayores con alguna dificultad