En diciembre de 2012 el puente de la carretera que unía los barrios de A Arroteña y A Pena en la parroquia de Casteláns, en Covelo, se vino abajo por una riada. Además de unir estos barrios el puente comunicaba Casteláns con Covelo sin la necesidad de un rodeo de varios kilómetros como tuvieron que hacer los vecinos durante más de un año debido a este suceso en donde además estuvo a punto de causar una tragedia, pues un coche con ocupante cayó al río. El puente tan solo tenía treinta años ya que fue construido por la diputación en 1982.
Sin embargo a tan solo unos pocos metros de este se mantuvo intacto un puente centenario de piedra que vio como la moderna estructura se desmoronaba junto a él. Prueba de la gran arquitectura e ingeniería de tiempos pasados que con pocos recursos construían puentes que durarían siglos.
Se denomina Ponte de Casteláns y atraviesa el río Verdexo, que en esta zona también es denominado Río Coveliño o de O Refuxio. Gracias a este los vecinos pudieron atravesar el río durante un tiempo, hasta que en Marzo de 2015 fue inaugurado el nuevo de hormigón que se encuentra prácticamente apoyado a este viejo puente y que recibió el nombre de José Costa Díaz, excalde de Covelo y que costó casi 350.000 euros.
El puente de piedra es de un solo arco y tiene rasante recta y por su estilo nos lleva seguramente al siglo XVIII, dando servicio hasta 1982.
Era empleado por el camino que desde Covelo se dirigía por Casteláns hacia Barcia de Mera y Piñeiro con dirección a Fornelos, camino empleado por los arrieros que desde Fornelos se dirigían luego la costa. Recordemos que Covelo ha sido desde siempre una tierra de arrieros y los caminos en estas comarcas eran fundamentales para una buena comunicación. Prueba de ello es la gran cantidad de puentes centenarios que aún podremos ver en la comarca.
A ponte de “Santestevo” (santo Estevo), leva o nome do patrón de Casteláns, une os barrio de A Pena co barrio de a Costa.
Xusto uns metros máis arriba da ponte estaba o antigo cemiterio (aìnda queda algún resto) do mosteiro de monxas benedictinas de “A Virxe” do que só se conserva parte da sua ábside (aproximadamente 300 metros máis arriba)
Grazas! Coñecemos os restos do mosteiro pero descoñeciamos o da «Virxe» e o nome da ponte.