El río Groba es uno de los causantes de la formación de los arenales sedimentarios de la Foz del Miñor y justo antes de sus desembocadura en Sabarís es cruzado por varios puentes de diversas épocas.
Por aquí discurría el antiguo camino real que venía por la costa desde el Monasterio de Oia y pasaba por Baiona en dirección a Vigo. Antes de esto también fue aprovechado para el itinerario de una vía romana que algunos consideraban antes como parte de la per loca marítima o vía XX, que presuntamente tomaba un trayecto costero.
Sin embargo las últimas investigaciones apuntan que que la per loca marítima tenía trazados por mar y por el río Miño y por ello desde Bracara llegaría a Tui en donde descenderían el río Miño hasta la desembocadura y allñi, desde la isla del Forte da Ínsua, irían directamente navegando hasta el castro de A Lazanda que sería Ad Duos Pontes y desde ahí por tierra hasta la mansión de Atricondo (Santiago).
Aún así, eso no quiere decir que no hubiera vías romanas por estos lares, ya que se saben bien de la existencia de salinas romanas en la costa de Oia , una mansión en Viladesuso o incluso las minas de oro de A Serra da Groba.
Este pequeño puente de Sabarís que cruza el río Groba y que ha sobrevivido en zona urbana se denomina Ponte Vella y se trata de una estructura de origen medieval compuesta de un solo arco, con alteraciones debido a la canalización del río en este lugar. Además su estructura actual se asemeja más a los puentes del siglo XVIII.
No muy lejos existe otro puente de tres arcos que cruza el río Guillade que desemboca en la Ladeira y que es conocido como Ponte Nova.
