En el concello de Toques, concretamente en la parroquia de Santa María da Capela, nos encontramos con uno de los monasterios más antiguos y uno de los más interesantes de Galicia. Es el monasterio de San Antolín de Toques, conocido también como A Capela. Muestras de esta antigüedad es la iglesia que es una de las pocas de Galicia que aún conserva rasgos románicos del siglo XI e incluso prerrománicos.
Cómo llegar
El lugar se localiza solitario en el estrecho valle que forma el Rego Pequeno, afluente del Furelos, río que divide las parroquias de A Capela y de Santa Eufemia do Monte. Para llegar hasta ella debemos seguir la DP-8002 que sale prácticamente desde Toques en dirección a la parroquia de A Capela. En la confluencia del valle del Rego Pequeno con esta encontraremos el monasterio.
Descripción
Allí a orillas de este pequeño río se encuentran los restos del antiguo monasterio de origen benedictino y sobre todo de su hermosa capilla. También encontraremos una torre-campanario con espadaña exenta a unos metros del lugar, similar a la torre de Barciela, en Forcarei. En la actualidad es iglesia parroquial y sobre su atrio existe un cementerio.
Se trata de una capilla de planta y ábside rectangulares con elementos visigodos, asturianos y mozárabes que fue remodelada en el siglo XI. Se cubre con madera y bóveda de cañón y en su interior destaca el arco triunfal de medio punto y los capiteles decorados. Uno de los elementos más destacados es el calvario románico de su interior el cual fue decorado con frescos a su alrededor en el siglo XV y que en el año 2015 fueron objetos de una intervención con la intención de recuperar y preservar esta joya histórica.
Historia
Los primeros escritos ya mencionan el monasterio en el año 1067, aunque como demuestran sus elementos decorativos su fundación se pierde mucho tiempo atrás. Ese mismo siglo sabemos que adopta la regla benedictina, siendo uno de los primeros monasterios constatados de esta orden en Galicia. También que su abad era un tal Tanoi. Ese mismo año el rey García hace donación y declara inmune «la heredad de Overi en el territorio de Abeancos», cuyo territorio pertenecía a su familia desde tiempo atrás.
En dicha donación se dice que seguían la Regla de san Benito, que su abad era Tanoi y que el monasterio se levantaba: «en un lugar habitualmente llamado “ferbencias”, que denominan “Tocas”, sobre la orilla del espumante río que baja de la montaña llamada Maura Mortua».
Es posible que el templo anterior estuviera en un lugar diferente tal y como los justifica Yepes: «Estuvo este monasterio al principio en lo más alto de un monte; después los monges le baxaron a otro sitio más acomodado para la vivienda humana […] Finalmente vino a parar el monasterio en el lugar donde agora está, que es junto al río Toques, de quien toma el renombre»
En 1124 pasas a depender de la diócesis de Santiago de Compostela y más tarde, en 1515, sabemos que posteriormente pasó a ser dependiente del monasterio de San Martiño Pinario hasta el año 1835.
Poco después de la desamortización del siglo XIX se construyó en las dependencias monacales una industria para la fabricación de clavos. Ese mismo siglo se prolongó la nave y se añadieron diferentes frescos en su interior.
Protección
Fue declarado Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento Histórico y Zona Arqueológica por el Decreto 192/1984, de 10 de junio.