En la comarca de A Terra do Bolo se asienta en un promontorio en 800 metros de altura que destaca por su escarpado acceso sobre todo por su vertiente sureste. Junto a ella se creó el pueblo de O Bolo que actualmente es el núcleo central de este concello. Su características dominantes sobre el paisaje circundante da pie a pensar en la existencia de un asentamiento castrexo del que hoy nada se puede apreciar por el paso del tiempo y la construcción de numerosas edificaciones en los alrededores.
La villa de O Bolo se cree que pudo se en la antigüedad prerromana Volobriga. En lo más alto del montículo se construyó la Torre de O Bolo.
Se sabe de la construcción de la Torre de O Bolo ya en el siglo XII y que eran ocho sus torres originales de las que hoy solo se puede ver nada más que una.
En su origen la Torre de O Bolo era una fortaleza rectangular con siete cubos y la torre del homenaje que resaltaba sobre las demás. Esta torre es la que se conserva hoy y tiene una altura de 18 metros y perdió también las almenas defensivas posteriormente. El interior se divide en un sótano que fue más tarde cárcel de la villa y tres niveles sobre este sótano. Como muchas otras torres la puerta principal se sitúa a altura para evitar ataques a la que se accedía por medio de una escalera de madera que más tarde pasaría a ser de piedra.
A su alrededor podremos ver algunos cubos defensivos y restos de la muralla circular que rodeaba el conjunto. Aún existe la puerta de entrada al patio de armas y un torreón semicircular que defendía la entrada. También veremos un aljibe dentro del recinto.
Algunas leyendas relacionan la creación del castillo con doña Urraca, hija del Alfonso VI. En el siglo XV perteneció a los Condes de Lemos y después a los Benavente. La segunda revuelta Irmandiña lo dejó maltrecho en 1467 pero fue reedificado por Juan Pimentel. El castillo llegó después en condiciones decentes hasta el siglo XVIII. A principios del siglo XXI fue restaurado y en sus dependencias alberga hoy un centro de interpretación.
Se encuentra bajo protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.
