A escasos metros del parque zoológico de A Madroa, en Vigo, se levanta una pequeña pero privilegiada loma desde la que tendremos unas impresionantes vistas de la Ría de Vigo.
En lo alto, además del tendido y los postes de alta tensión, se habilitó un mirador en los años 90 para disfrutar de las maravillosas vistas.
Pero lo que muchos no saben al ascender hasta la pataforma de lo alto es que a nuestros pies tenemos los restos de un poblado castrexo conocido como el Castro da Madroa y que durante la construcción del mirador no parecieron tener muy en cuenta. Del yacimiento no podremos ver nada más que intuir la croa y los terraplanes y parte del foso defensivo que rodeaba parte del castro.
Así que cuando nos deleitemos de las vistas pensar que ya los pobladores disfrutaban de ellas hace más de 2000 años sobre la croa de este castro.
En la actualidad lo mejor son las vistas del mirador de A Madroa, ya que además de la ciudad de Vigo veremos íntegramente la Ría de Vigo, desde el fondo de la ensenada de San Simón hasta la islas Cíes. También veremos todo el litoral de O Morrazo hasta Cabo Home. En la orilla de Vigo podremos ver los altos de O Galiñeiro y Monte Alba, convirtiendo este lugar en una atalaya inmejorable para la vigilancia en tiempos pasados.