Junto a la playa de Major, en Sanxenxo y cruzando la carretera PO-308 que une Sanxenxo con O Grove existe una pequeña laguna de agua dulce que alcanza las 2,3 ha de extensión.
Geogógicamente la costa gallega de las Rías Baixas se encuentra en un proceso de hundimiento lo que favoreció durante siglos la formación de lagunas intermareales muy cerca del mar. Sin embargo, la Lagoa de Major no es una laguna natural sino que en su formación interviene la mano del hombre. Es posible que se aprovechara la depresión formada por una antigua laguna para el embalsamiento de esta agua que se utilizó el siglo pasado para el abastecimiento de agua de la población de Portonovo.
Hoy día su uso original ha desaparecido por lo que la naturaleza se ha hecho cargo de ella convirtiéndola en un lugar de paso y cría para varias especies de aves y pequeños mamíferos e invertebrados. Además del agua estancada de la lluvia el lago recibe el agua del conocido como Rego do Souto, que después de esta vierte sus aguas en la vecina playa de Major.
Por encima de la laguna y siguiendo el río tenemos una muestra de tres molinos de agua totalmente abandonados.
Hoy día, la laguna se encuentra sujeta a una presión urbanística sin ninguna medida lo que provoca una gran abundancia de basura y restos de obras. Por si esto fuera poco, la laguna aguanta también la presión de una pista de karts cuyas instalaciones y también material se localizan a orilla del embalse e incluso dentro de ella.
