Hablar de arte románico en el rural de Galicia es nombrar la iglesia de San Xulián de Ventosa. Por algo Filgueira Valverde la denominó la «Catedral del románico rural».
Esta iglesia parroquial de San Xulián de Ventosa pertenece al concello de Agolada, municipio situado en el noreste de la provincia, ya lindando con Lugo.
La importancia de este templo radica en que contiene en su interior un importantísimo conjunto de esculturas procedentes de dos baldaquinos que fueron desmontados en 1895. También añadimos las pinturas murales descubiertas en este siglo. Como muchas otras iglesias, sufrió importantes modificaciones desde su época original románica (XII-XIII).
La planta es de cruz latina, pero no en su origen. En el siglo XVI se añade una capilla y la sacristía. Por desgracia, derribaron el arco triunfal en el siglo XIX. Durante estas obras amplía el ábside creando el aspecto de cruz latina actual, ya que esta junto con la antigua sacristía formarán las nuevas capillas laterales. En esta misma reforma se desmontan los baldaquinos pasando a formar parte de los muros de la iglesia.
En el interior de la iglesia de San Xulián de Ventosa, además de las piezas de los baldaquinos, veremos un fabuloso sepulcro en donde se piensa que está enterrado el abad Lope de Ventosa.
Se dice que tanto el baldaquino como el sepulcro podrían haber sido obra del Maestro Mateo o uno de sus discípulos. Otros cuentan que el sepulcro sería del siglo XIV o XV y que fue colocado aquí cuando se trasladó la iglesia original románica desde el lugar de Os Chaos.
En el interior de la iglesia veremos diferentes paneles con toda la información iconográfica de los baldaquinos y las pinturas murales.
Debemos saber también que la iglesia de San Xulián de Ventosa está a solo unos metros del Castro de Tras de Castro, el cual está muy desconfigurado y a primera vista poco podemos apreciar de él.
En la fachada nos sorprenderá la erosión provocada en la piedra por las cadenas o cuerdas que daban sonido a las campanas. Las campanas actuales están sostenidas en una espadaña barroca.
Nada lejos, en el Monte de Cartimil, podremos ver un sepulcro doble excavado en roca cuyo cronología pudiera irse hasta la alta edad media.
Muy bonita, axcelente, Gracias por enviarmelo.