A la colegiata de Santa María se le conoce también como Santa María de Campo por estar situada fuera del antiguo recinto amurallado de la ciudad de A Coruña. Se construyó entre los siglos XIII y XV por uno de los gremios más poderosos de la ciudad en la época, los mareantes. Son muchos los marineros que acuden a rezar para pedir por una buena travesía o para dar las gracias por volver de otra ya acabada. En 1441 recibe la categoría de colegiata de manos del arzobispo de Compostela Don Lope de Mendoza.
En el último siglo de su construcción (XV) se configuró su aspecto actual. Dispone de tres naves rematadas en la cabecera por un gran y antiguo ábside semicircular cubierta por bóveda de cascos. Al igual que la iglesia de Santiago presenta tres portadas. La principal en la que se puede ver la decoración de la última remodelación del siglo XIX, la sur que es la más antigua y con una hermosa decoración en donde se representan escenas del Evangelio y la norte que mantiene un tímpano esculpido. A finales del XV o principios del XVI se incorporaron la torre, las gárgolas y el rosetón de la cabecera de las naves. Su interior también alberga un museo de arte sacro.
La colegiata de Santa María guarda en su interior magníficos tesoros como la arquilla barroca, regalada por la reina Mariana de Neoburgo, las imágenes de la Ascensión y sobre todo la talla de María Magdalena obra del gran imaginero Pedro de Mena.
También hay que mencionar el hermoso cruceiro del atrio que es también del siglo XV, convirtiéndolo en uno de los más antiguos de Galicia.
La iglesia se encuentra frente al Pazo de Cornide, de estilo barroco (s. XVII) edifico proyectado por Diego Cornide.
