En Liñares, muy cerca de los límites del concello de As Neves y Salvaterra de Miño, desemboca el pequeño Río Xuliana y lo hace en el gran río Miño de una forma muy especial, en forma de pequeña cascada. Este río tiene un trayecto de apenas 5 kilómetros desde su nacimiento cerca del Monte de Feresvello.
Pasa por Rubiós, Tortoreos y Liñares para después llegar al río Miño en donde vierte sus aguas en forma de una pequeña cascada de unos tres metros de altura.
Incendios de 2017
En octubre del año 2017, una devastadora ola de incendios dejó gravemente herida gran parte del concello de As Neves. La orilla del río Miño no se salvó y las riberas fueron envueltas en llamas y sus árboles fueron reducidos a cenizas. Esta zona de la desembocadura del Xuliana no tuvo mejor suerte y fue dañada también por los fatídicos incendios.
Nosotros conocimos por primera vez este lugar un par de años antes de esos incendios y la maleza y malas hierbas ya cubrían gran parte del lugar y de hecho solo conocimos un molino de los tres que había. Después de los incendios no se hizo nada por su recuperación y las silvas, los eucaliptos y las acacias comenzaron a colonizar todo. Tan solo lograron sobrevivir algunas sobreiras (alcornoques) que con su protección de la corteza de corcho resistieron el gran calor del fuego.
Depuradora y captación de agua en 2019-2021
La proximidad del Puerto Seco de Salvaterra y As Neves propició la construcción muy cerquita de una gran depuradora y durante dos años se ejecutaron obras en las proximidades provocando que el lugar no se pudiera visitar. Una captación de agua también fue instalada a unos metros de la cascada del río Xuliana. A pesar de que el lugar presentaba mal aspecto en ese momento, después de las obras se ejecutaron tareas de limpieza y acondicionamiento del lugar, dejando al descubierto los dos molinos junto a la cascada y reforestando con árboles caducifolios la zona.
Molinos del Xuliana
Unos metros antes de llegar al Miño, el río Xuliana desaparece artificialmente para pasar bajo la vía del tren. Por encima de él, un puente de piedra del siglo XIX aguanta la vía del tren. Antes de cruzarlo para llegar a la desembocadura, veremos los restos de un gran molino junto al río.
Todos los puentes que se hicieron en el siglo XIX con motivo de la construcción de la vía férrea Vigo-Ourense, tenían un motivo. Este era dar acceso al lugar de A Ceña, en donde además de este molino había otros dos junto a la pequeña cascada.
Una aceña o ceña (acea en gallego) es un molino que se diferencia del resto por la posición vertical de su rueda. También puede ser la presa que embalsa y desvía el agua hacia un molino.
La parte del «tremiñado» y muros de estos dos molinos están hechos con ladrillos, probablemente a mediados del siglo XX. Sin embargo, sus infiernos están construidos sobre y aprovechando grandes rocas del lugar. El molino de abajo tiene junto al «inferno» una especie de bodega o almacén, quizás aprovechado para guardar aparatos para la pesca de la lamprea y otros en el río Miño.
A ellos llega un canal desde el río para el cual fue necesario tallar una gran roca. De la primitiva presa que en su día debiera abastecer de agua a los molinos no queda nada.
Cómo llegar
Su acceso no es fácil y no existen indicaciones. Lo mejor es acercarse a la carretera que nos lleva a la Ermita de Santa Mariña y antes de llegar a ella y de cruzar la vía del tren debemos coger una pista a la derecha justo en una gran curva en donde está el nuevo cementerio: Esta pista nos llevará paralelos a la vía hasta el puente del tren por el que debemos pasar para llegar a este rincón.
Sendero de los pescadores
Si seguimos por los molinos por el sendero de los pescadores llegaremos al área recreativa y ermita de Santa Mariña. Antes de llegar a ella, veremos una pequeña construcción de ladrillo en un lugar de vistas privilegiadas sobre el Miño. Podrá tratarse de una garita de vigilancia de la «raia» de siglo XX.
Más adelante, veremos los restos de una gran edificación de piedra junto al primitivo camino. No sabemos su función, pero probablemente también se relacione con la vigilancia de la frontera portuguesa, aunque esta sería más antigua. Esta casa es muy similar a otra existente en la zona de A Barrela, también en el sendero de los pescadores de As Neves.
Fui y no conseguí encontrarlo. No sé si los incendios hicieron desaparecer el camino, pero desde la Ermita de Santa Mariña fue impracticable. Tampoco conseguimos llegar al lugar de la fervenza por carretera. ¿Tenéis alguna indicación de cómo llegar?
Desde Santa Mariña no se puede… Por la carretera que bajaba si os fijasteis había un cementerio a construir, por allí junto a él sale una pista de tierra que va paralela a la vía del tren hacia la derecha. Suele estar practicable para vehículos. Donde acaba está el molino y la fervenza, uno a cada lado de la vía. La última vez que fui, justo antes de los incendios el molino no se veía de la vegetación en forma de silvas. Tampoco te esperes una gran fervenza. Desconozco si ardió este área, pero fijo que a unos metros sí lo hizo.