La Via Nova o Vía XVIII del itinerario de Antonino unía Bracara (Braga) con Asturica. En su recorrido por las tierras de Trives cruzaba el Río Navea por el hermoso puente y se dirigía al Bierzo. Estas tierras nos dejaron multitud de vestigios de la andadura de los romanos durante su colonización, sobre todo en forma de miliarios. Su función era informar de las distancias, aunque también los había meramente honoríficos y anepígrafos. Prueba de ello son estos cuatro miliarios que hoy en día han sido reunidos y adornan este lugar, que se sitúa al lado de la carretera OU-536. Se localizan en Guístolas y reciben el nombre de miliarios de Cerdeiras o de Fonte das Guístolas. El concello que las acoge es San Xoán de Río.
Su ubicación se completa con un pequeño área recreativa con unas mesas y una fuente.