Estamos en uno de esos lugares que con toda seguridad podría ser un atractivo más para el concello de As Neves, debido a las imponentes vistas que se verían desde aquí. Sin embargo en nuestra visita en 2020 el lugar daba pena… Desde los incendios de 2017 así quedó toda la zona del monte de Santa Bárbara. Madera y troncos quemados, árboles caídos y una cantidad de maleza renaciente que en la actualidad se convierten en el caldo perfecto para nuevos incendios. Una pena.
Se trata de un alto en las estribaciones del Monte da Cachadiña al borde del valle del Miño que se eleva 250 metros sobre el nivel del mar. Debido a los eucaliptos y los fósiles de los árboles calcinados no se puede apreciar ninguna vista. Sin embargo si nos acercamos a los alrededores nos daremos cuenta que desde allí podríamos ver una gran parte del valle del Miño, desde Melgaço hasta Tui, o quizás más allá en un día claro.
El cruceiro del alto se construyó en 1911 y sobre el capitel tenemos la imagen de Santa Bárbara, figura que fue robada en 2012 y al poco tiempo remplazada por una obra del escultor de Tortoreos José Luis Pereira, hecha de granito silvestre moreno que mide 55 centímetros y tiene dos coronas de latón.
Para llegar hasta aquí tan solo debemos localizar el campo de fútbol de As Neves y continuar la carretera que asciende y que pasa por el depósito de aguas. A unos 200 metros a la derecha habrá una pista por la que deberemos ir a andando y que tan solo tendremos que seguir hasta el final, ya que nos llevará hasta el cruceiro de Santa Bárbara. Antes de llegar veremos un par de piedras en posición horizontal con sendas cruces grabadas que probablemente sean marcos de división parroquial o cruces de término ya que esta zona se separan las parroquias de Setados y As Neves.