En la carretera que une Esperante con Mostaz se ha habilitado un mirador para contemplar el valle del río Lor y las montañas tan características de O Courel y que forman A Serra do Rañadoiro, los Montes de Lóuzara o A Serra de Oribio. Si nos fijamos bien podremos ver también la zanja artificial creada por los romanos para la extracción de oro y que se le conoce como Mina da Toca, en el monte del mismo nombre y que corona el Taro Branco de 1228 metros.
Muy cerquita podremos acercarnos a los restos del Castelo do Carbedo.