La Fervenza da Graña es una de las grandes cascadas desconocidas de Galicia. Eso no impide que este salto de agua se encuentre entre los más altos de la provincia de Pontevedra. Se localiza muy cerca de la aldea de A Graña, en Forcarei, dentro de la parroquia de Madanela de Montes.
Si es desconocida se debe a que no existe señalización ni puesta en valor, e incluso podemos afirmar que no existen accesos decentes, lo que la hace prácticamente inaccesible para muchos. Eso no quiere decir que se pueda llegar hasta ella y quizás muchos digáis que incluso os resultó sencillo. Puede ser que lo sea, pero aún así debemos extremar precauciones en cuanto a resbalones. Es probable que en época de lluvias su acceso incluso se vuelva impracticable.
Nosotros llegamos hasta ella sin imaginar el magnífico espectáculo que nos brindaría esta cascada que forma el Rego do Porto en un valle dentro de los Montes do Testeiro. El Rego do Porto es un pequeño regato afluente del Río Deza que nace muy cerquita de Alto do Couto, a 931 metros.
Pasa por San Xusto, Os Codesás, Ventosela y poco después por las inmediaciones de A Graña, lugar que da el nombre a esta fervenza. Es probable que también la encontremos nombrada como Fervenza de Trasdomonte, pero este lugar lo encontraremos más lejos, junto Os Codesás, por ello sería más concreto el nombre de Fervenza da Graña.
Su localización no fue fácil, aunque sabíamos dónde estaba pues bien marcada está en Google Maps. No nos resultó sencillo debido al acceso. Los vehículos deben quedar antes de entrar en la aldea de A Graña, allí junto a la parada de bus, encontrareis buen espacio.
Ahora debemos atravesar toda la aldea y seguir un camino hacia el valle. (Abajo os ponemos nuestra ruta). Nos comentaron que debíamos bajar una empinada ladera a través de monte raso, pero al llegar hasta allí, dimos vuelta y decidimos bajar al Rego do Porto por otro lado. Bajamos al río por su lado izquierdo y seguimos aguas abajo como pudimos por estrechos senderos medio cubiertos de silvas hasta llegar a una antigua pontella de piedra, la cual cruzamos.
Poco le queda a este puente, pues muchos de sus sillares están en el lecho del río y su estructura se encuentra muy deteriorada.
Central hidroeléctrica
Por esta orilla parece que el camino se abre un poco hasta que vemos el agua embalsada por una presa de hormigón casi centenaria. Un poco más y ya vemos la cascada. Llegamos a un rústico muro y a un canal que conducía las aguas desde la presa. Este llega a una construcción de piedra cuadrangular en la ladera del valle del Rego do Porto. Por lo que vemos, tanto el embalse como esta conducción, serían los restos de una antigua central hidroeléctrica desaparecida. Entendemos que desde esta última construcción bajaría un tubo hasta la central, cuyos restos se localizan poco más abajo de la cascada de A Graña.
Desde aquí, nos llamará la atención una construcción al otro lado del valle.
Alvariza da Graña
Antes de llegar, un vecino nos dijo que teníamos que bordear «a ferradura», detalle que entendimos perfectamente cuando vimos una construcción con esa forma desde el otro lado del valle. Se trata de una antigua alvariza, ya sabéis, esas construcciones centenarias que servían para proteger los panales de abejas y su miel de los ataques de depredadores, como el oso. A parte de sus muros, asombra la empinada ladera en donde se construyó.
Fervenza da Graña
Desde el sifón para la bajada del agua del canal, nos dejamos caer por la ladera hasta los pies de la cascada de A Graña para disfrutar del espectáculo de este salto de agua que salva una pared rocosa vertical de unos 17 metros.
Camino de vuelta
No nos gusta volver por el mismo camino, así que decidimos ascender la ladera empinada del valle para pasar por la alvariza, ya sabéis normalmente subir es menos peligroso que bajar, y más teniendo ahora una buena perspectiva del recorrido. Para ello debemos cruzar el río, no hay problema, una docena de metros más abajo existe otra pontella por la que pasaremos cómodamente. Ahora solo debemos subir y subir hasta alcanzar una pista de tierra que nos llevará de nuevo hacia la aldea de A Graña.
Cómo llegar – Ruta
No os podemos confirmar que el sendero que va junto al río esté siempre practicable, por lo que quizás sea la opción más “segura” el descenso por la ladera de la alvariza. Ojo a las lluvias, quizás sea mejor dejarla para otro momento.
Efectivamente es una cascada muy bonita, pero desconocida por la gran mayoria, esto es principalmente por la desidia de los ayuntamientos de no mantener, y digo mantener, no hacer senderos y despues dejarlos olvidados para que los aficionados al senderismo puedan llegar a estos paisajes abandonados. Conozco esta fervenza desde hace años, y a veces es imposible acercarse a ella por la maleza reinante.