Esta pequeña capilla de San Paio de Codeso de Boqueixón se localiza junto al cauce del Río Pontillón, muy cerca de la llamada Fervenza de Codeso. Como su nombre indica en ella se venera a San Paio (San Pelayo) cuya imagen se guarda en la iglesia parroquial de Codeso y tan solo se baja para la fiesta que se celebra el último domingo de Junio.
La capilla es de planta única, barroca y presenta escasa decoración. Tan solo podremos ver un pequeño óculo, unas molduras y una espadaña en lo alto del testero. Podremos ver dos placas que nos dan fe de la última restauración en el año 2003, después de que estuviera mucho tiempo abandonada, y otra placa más antigua con una inscripción más escueta donde nos informa que esta capilla fue «restaurada por el cura y los feligreses en 1802». Sobre la antigüedad de la capilla se cuenta que es de mediados del siglo XVII.
El entorno está rehabilitado y junto a la iglesia se encuentra una vieja fuente de propiedades milagrosas de la que aseguran que quita el «asombramento» que causan los gatos en los niños.
La capilla de San Paio es punto de inicio para la ruta denominada del Río Grande, que discurre paralela al río Pontillón y en la que podremos ver varios molinos y sobre todo varias cascadas espectaculares.
