En Santo Estevo de Pedre se encuentra un bonito conjunto del siglo XVIII formado por una iglesia barroca, varios cruceiros, una fuente y un estupendo conjunto de hórreos conocidos como A Eira Grande. La zona cuenta con 22 hórreos construidos en piedra y madera y cubrición a dos aguas a base de teja y otros de piedra.
Estas concentraciones de hórreos se disponían en las laderas más ventiladas de la montaña para resguardar y preservar sobre todo el maíz y en menor medida el trigo y el centeno. A menudo estos conjuntos se apostaban cerca de grandes vías de comunicación para servir y aprovisionar a los comerciantes que circulaban de norte a sur y de este a oeste.
Estas zonas eran parte fundamental de la cultura popular pues en ellos se juntaban los vecinos para celebrar sus fiestas y romerías y en torno a esta plaza giraba la vida social de los habitantes. Una gran roca plana podría servir en la antigüedad para realizar «a maia» utilizada para separar el grano del resto de las impurezas.
De mencionar es también la arquitectura popular de las viviendas del barrio y la Iglesia barroca de Santo Estevo.
Ladera abajo discurre el Lérez, río que vadea el puente de origen romano de Pedre. Muy cerca tanbién está el conjunto arquitectónico de Serrapio, lugar del que recomendamos su visita.