A escasos metros del área recreativa de A Carixa, sobre el río Deza, existen los restos de un puente de piedra de un solo arco. Sobre su datación es probable que tenga un origen medieval, más tendiendo en cuenta su cercanía al monasterio de Carboeiro. Sin embargo el arco que hoy vemos es la obra inacabada de Manuel Sueiro Ramos (1928) que posiblemente intentará reconstruir el anterior medieval que se llevó una riada. Justo al lado de este viejo puente se ha construído uno moderno que adentra la carretera en el valle del Deza. Muy cerca no podemos dejar de visitar uno de los saltos más espectaculares de Galicia, A Fervenza do Toxa.
Después de serios daños en su estructura y por miedo a derrumbe en el año 2018 comenzaron las obras de remodelación que le dieron el aspecto actual.
(Ver más fotos de antes de su reparación de 2018)