Playa de Maceira

Playa fluvial de Maceira en el Río Tea

El Río Tea es aprovechado desde su desembocadura hasta casi su nacimiento para el disfrute de sus aguas en muchos puntos de su recorrido. Prueba de ello es esta playa fluvial acondicionada a su paso por la parroquia de Maceira en Covelo. Con playas como esta no es necesario desplazarse hacia la costa para darse un refrescante chapuzón o bien pasar un día agradable en un lugar hermoso.

Playa fluvial de Maceira

La verdad que este sitio destaca por su entorno natural y por lo bien que han sabido adaptarlo a la naturaleza. Lo forma una isla central con mini piscinas rústicas para los más pequeños y un pequeño kiosko-bar que sirve bebidas y bocadillos. La isla es rodeada por el río que es apto para el baño de los adultos y cuenta con unas aguas cristalinas de calidad excelente.

Puente de Maceira

Además alrededor dispone de multitud de zonas de descanso y mesas. La playa dispone además de servicios públicos, así como un parque infantil a unos doscientos metros.

Playa Maceira

Si nos damos un chapuzón y seguimos río arriba por debajo del puente de la carretera que viene de Maceira, podremos admirar como el Tea se adentra en una estrecha garganta y forma espectaculares pozas y pequeñas cascadas. Río abajo, a unos doscientos metros de la cascada artificial que forma el remanso de la playa, podremos acercarnos hasta el Muíño de Maceira que ha sido recuperado recientemente.

A escasos metros de la playa fluvial están las instalaciones del camping que después de casi diez años de espera por causa de malversaciones de fondos fue abierto al público en julio de 2012. Un lugar ideal para el descanso, la playa y sin duda para disfrutar con calma de los maravillosos lugares que ofrece el concello de Covelo. Uno de los periódicos británicos más famosos, The Guardian, recomendó este camping para alojarse.

Prueba del reconocimiento en el exterior de la playa fluvial de Maceira es la selección de la revista Wild Swimming como uno de los lugares de España más bonitos para nadar.

El origen de la playa se lo debemos al molino que se ubica unos metros más abajo, pues su «ceña» (presa) es la que retenía el agua del Tea. Hoy en día la presa está rehabilitada para la función de playa fluvial.

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