En la parroquia de Meirás, muy cerca de la conocida playa de A Frouxeira, más conocida para los de fuera como Playa de Valdoviño por estar sita en este hermoso municipio coruñés, se localiza la Ermita de Nosa Señora do Porto, Virxe do Porto o Nosa Señora do Mar.
Una pequeña capilla blanca parece desafiar las tempestades y temporales oceánicos y tan cerca del mar que se construyó sobre una isla rocosa a la que sólo se puede acceder cuando la marea está baja. Ose dejamos los horarios de las mareas de desde Meteogalicia.
Tan solo separa de esta fantástica playa, paraíso de surfistas y otros deportes de mar, la conocida como Punta Frouxeira donde se levanta uno de los faros más modernos de Galicia (1992) después del Faro de Punta Nariga (1998). Cuenta la leyenda que unos marineros encontraron la imagen de la Virgen en el mar y se la llevaron a tierra.
Sin embargo algo hizo que al día siguiente estuviera de nuevo en el mar. Allí, sobre unas rocas, decidieron levantar una capilla para proteger la imagen santa. El 11 de julio se realiza una romería en la que se saca a la Virgen en procesión. Esta Virgen de Nosa Señora do Porto cuenta con una gran devoción, no solo en Valdoviño, sino en toda la comarca.
La zona de Valdoviño destaca por su calidad paisajística y natural ya que desde la zona de la capilla se pueden observar una bonitas vistas de los acantalados y de Punta Frouxeira. Además se encuentra muy cerca del Espacio Natural da Lagoa e Areal de Valdoviño, que forman la playa, la laguna y las marismas de Frouxeira. A escasos metros del islote donde se localiza la capilla existe una piscifactoría donde se cría rodaballo y otras especies.
Estupenda toda la información que dais de cada cosa. Aparte de aprender de forma seguida muchísimas cosas, que aún y siendo de por esta zona, no nos enteraríamos de la cantidad de detalles que se nos escaparían.
Enhorabuena y seguir cultivando las mentes de todos aquellos que estamos interesados en conocer cada día algo mas.
Gracias
Mil gracias a ti!
Hermosa zona! Tengo grandes recuerdos de cuando estabamos estudiando en el convento de Baltar, allá por los años 60. En los dias de descanso, nos llevaban o a la playa de Campelo; en ese tiempo, habia que ir por senderos porque no habia carreteras; al igual que cuando ibamos a la Virgen do Porto; tambien caminando por «carreiros» como dicen por alli. Me acuerdo, que esperamos a que bajara la marea para llegar a la ermita. Muy bonita toda esa zona!