En Portugal, desde Monçao a Melgaço debemos coger muy pronto una desviación que nos llevará por la N304 desde Troviscoso hacia Longos Vales y al Castro de São Caetano. En la primera de las «freguesías», hoy unida a la de Monção, se encuentran los restos de una capilla junto a la carretera, a poco más de un kilómetro del desvío.
Se encuentra en una zona rodeada de vestigios históricos como castros, castillos, pazos, «penedos» sagrados, monasterios, santuarios… una zona realmente interesante. Sin embargo en los últimos lustros ha aumentado la presión en estos lugares y los incendios se han cebado en gran parte de este territorio, dejando a su paso un monte raso y carbonizado que cuando no es tomada por rastrojos es repoblada con inmensas plantaciones de eucaliptos. Por si esto fuera poco, extensos campos han pasado a convertirse en plantaciones interminables de uno de los frutos más preciados, la uva blanca que crea uno de los mejores vinos blancos de la península, el «alvarinho».
Desde los restos de la capilla podremos observar estos enormes campos y por detrás de ella podremos ver la invasión del eucalipto repoblado.
La capilla es de propiedad privada y actualmente su estado es de ruina y amenaza derrumbe. Pertenecía a la Quinta da Pedra, una gran extensión de campos de cultivo y arboleda cuyo centro era una gran casona. Por lo que hemos sabido gracias a un vecino, la capilla está dedicada a Guadalupe.
Consta de dos cuerpos rectangulares divididos por un arco del triunfo en forma de medio punto. Su fachada orientada al oeste se abre con una pequeña puerta adintelada flanqueada por dos ventanas. Por encima de ella se conserva un escudo nobiliario posiblemente perteneciente a la familia a la que pertenecía la capilla. Nos llamará la atención las vieiras que también hemos visto en otros escudos cercanos. A su lado una hornacina en forma también de vieira protegía la figura de la Virgen.
El interior es sobrio y poco se conserva, aunque aún aguanta la bóveda que cubre la capilla mayor. En su fachada norte se abre una pequeña puerta de arco de medio punto.
En cuanto a su datación creemos que se trata de una iglesia barroca del siglo XVIII. Desde este lugar hacia el Este y a unos 500 metros podremos ver una loma que se levanta sobre los campos de vid en donde sobresalen gigantescos penedos graníticos. Lo que no esperábamos es que en ese lugar hubiera un pequeño y fascinante santuario dedicado a Nossa Senhora da Pedra. Mirando al sur sobre una montaña veremos también la capilla de São Caetano, sobre el castro del mismo nombre.
No muy lejos siguiendo la carretera hacia Longos Vales, en Samarão, una gran loma con superficie aplanada recibe el nombre de Monte Crasto, en alusión a un poblado de origen castrexo. Sobre su cumbre posteriormente también existió algún tipo de fortaleza medieval.
pois e unha magoa que se atope deste xeito, canto patrimonio aruinado
El eucalipto para Australia.
Roble para Galicia.
Capilla dedicada a Nuestra Señora de Guadalupe, ubicada en Quinta dos Cordeiros, construida por Joana Lobato, viuda de João Palhares. Aproximadamente en el año 1612.
«O REGISTO de uma provisao de uma capela de Nossa Senhora de Guadalupe, para se dizer missa, e verbas da escritura da fabrica da capela, sita na quinta dos Cordeiros, a favor de Joana Lobato, viuva de Joao de Palhares, da vila de Moncao.»
Muchísimas gracias por la información! Un saludo.