Seguro que sois muchos los que conocéis o habéis oído hablar de las playas de Nerga, Viño y la nudista de Barra.
Estas paradisíacas playas de Cangas y de la parroquia de O Hío forman una fantástica ensenada denominada Enseada de Barra.
Sin embargo, seréis menos los que tengáis conocimiento de los yacimientos arqueológicos situados a la mano izquierda de la ensenada y de la playa de Nerga. Se localizan a pie de mar, sobre un montículo que apenas sobrepasa los 15 metros de altura.
Se trata de los restos casi imperceptibles de un castro conocido como Castro da Eirexiña y el petroglifo o grabado rupestre de As Aeiras o de A Eirixiña.
Del castro poco o nada podremos ver ante nuestros ojos inexpertos. La zona está muy agredida por edificaciones levantadas sobre el mismo recinto de este castro costero.
El petroglifo da Eirixiña sí que lo hemos localizado. Se trata de una roca con unas cuantas coviñas grabadas alrededor de lo que parece una pila. Esta podría ser natural creada por la erosión, aunque bien podría haber ayudado el ser humano a darle forma.
Por lo general es difícil saber la cronología del petroglifo. Es frecuente verlos sobre castros, pero en su mayor parte no guardan relación en el tiempo, aunque probablemente sí en su uso.
Pero en este caso y muchos otros y sobre todo al tratarse de un castro costero podrían guardar relación con los primeros habitantes del castro o del poblado primigenio.
El topónimo «eirexiña», diminutivo de «eirexa», hace referencia a un pequeño templo o iglesia. Es probable que el lugar fuera zona de culto pagano en un pasado.
El yacimiento arqueólogo de A Eirixiña estaba totalmente desprotegido y no existía ningún tipo de señalización. Incluso el petroglifo estaba parcialmente cubierto por maleza.
Si os interesa saber todo sobre las coviñas os dejamos un enlace a este gran trabajo sobre este tipo de petroglifos de Julio Fernández Pintos: Introducción a los petroglifos de coviñas en el Arte Rupestre Gallego.
Además de estos famosos arenales, podremos conocer el entorno de Cabo Home, la playa de Melide o el mítico Monte do Facho y su castro.