En Randín, al sur del concello de Calvos de Randín, encontraremos dos aldeas perdidas rozando ya con la frontera de Portugal. Se localizan a más de 1000 metros de altitud y en la llamada Serra da Pena.
Se trata de Vilar y Vilariño, y a esta última nos hemos ido en busca de un secular calvario junto a la carretera. Se sitúa unos metros por encima de la aldea, en la carretera que se dirige a Vilar.
Este curioso conjunto de cruces parece haber sido restaurado y recompuesto en diversas ocasiones. Las cruces se levantan sobre un pedestal cuadrangular y bajo ellas otro más grande que hace de asiento para las tres. Todo este conjunto se levanta sobre un bloque de piedras de mampostería.
Unos metros más abajo veremos otras dos cruces que parecen fuera de lugar o quizás y lo más probable es que formaran parte de un vía crucis que llegara hasta este calvario de Vilariño.
Este calvario fue recuperado gracias a los fondos de Feader entre los años 2012-2013 y promovido por el concello de Calvos de Randín.
Muy cerca, en dirección a Randín, encontraremos un precioso rincón formado por la Fervenza de Vilariño sobre el Regato do Muíño Vello.