En la falda oeste da Serra da Groba, se encuentra una serie de valles y cuencas fluviales, formados por pequeños ríos que descienden de manera vertiginosa hacia el mar. Además, la naturaleza rocosa del subsuelo aumenta la dureza del terreno, lo que hace que los ríos tengan que rebasar importantes obstáculos en forma de cascadas y pozas. Uno de estos lugares es el formado por los «regos» de Mougás y de Pías.
Para llegar a las Pozas de Mougás es preciso ir por la C-550 que une A Guarda y Baiona. En la parroquia de Mougás, nos dirigiremos hacia el este, en dirección a la sierra. Sin desviarnos, continuaremos hasta un mirador junto a a la antigua caseta forestal que data del año 1962, allí nos paramos. En las proximidades de esta, existen especies de árboles alóctonas, lo que da la impresión de haber sido un vivero forestal.
Sin olvidarnos de disfrutar de las vistas del infinito océano que desde aquí se divisan, seguiremos a pie la pista de tierra que desciende hacia el valle. La distancia hasta los ríos es de apenas 2 km.
Continuaremos atravesando un denso bosque, donde desafortunadamente y debido a los incendios habituales en las últimas épocas, abundan los eucaliptos con algún que otro árbol autóctono intercalado. Rebasaremos pequeños ríos y hasta la espectacular cascada que forma el Río da Fervenza, que forma el Río Mougás y que en época de lluvias es todo un espectáculo.
Más adelante merece la pena llegar a la poza artificial, en la cual vierte las aguas en forma de pequeña cascada, el Rego da Pías. Conviene perderse entre los dos ríos y admirar las magníficas pozas naturales que abundan en los cursos fluviales.
En verano, las Pozas de Mougás se convierten en lugar de disfrute para los bañistas. Además, cerca del Rego das Pías, se localiza un área recreativa formada por un buen número de mesas y alguna fuente. De todas formas, la mejor época para disfrutar de estos parajes son las temporadas lluviosas, cuando la abundancia de agua forma verdaderas maravillas de la naturaleza.
La presencia de ganado equino en estos montes desde tiempos remotos y la celebración de los famosos «curros» en las zonas próximas, favorecen la existencia de un picadero desde donde se puede realizar rutas a caballo hasta las pozas y otros lugares de las proximidades. El 22 de Mayo y el 14 de Agosto se celebran en curros en la parroquia de Mougás.
