En Chantada se encuentra los restos de un sueño inacabado que un sacerdote llamado Emilio Eyre Lamas quiso hacer realidad. Corrían los años 40 del siglo XX cuando el padre Eyre estuvo ligado a la embajada de Lisboa durante dos años. De allí le vino su admiración por el «Milagro de Fátima» que quiso traer a Galicia.
Su afán y su tesón le hicieron empezar a construir el primer santuario de advocación a Fátima de España. En 1944 comenzó a construir el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Fátima sobre los restos de un antiguo castro en un lugar conocido como Centulle, en la parroquia de San Xurxo de Asma, a 599 m sobre el nivel del mar y muy cerca e la villa de Chantada.
Centulle deriva del latín «centurie» lo que nos da una idea de la romanización y de un posible campamento romano en el lugar. Amigo de la historia y del arte, el padre quiso hacer una mezcla de varios estilos artísticos que abarcaran el prerrománico, pasando por visigótico, el románico de línea asturiana, el gótico y otros estilos más modernos, todo ello con una influencia irlandesa-céltica a semejanza a las fortalezas de Irlanda donde el padre también había estado. Además su cimentación sobre un poblado castrexo influyó notablemente en su obra. Esta cimentación hizo que quedaran al descubierto diversas estructuras del castro, útiles de diversas épocas, así como el foso defensivo del castro. El sacerdote intentó crear un edificio anexo que sirviera como museo para este tipo de hallazgos, pero el escaso apoyo recibido hizo que su proyecto quedara en el olvido. El templo se paralizó y quedó abandonado en el año 1957 por «agotamiento de recursos». Así fue como quedó hasta nuestros días con un mínimo mantenimiento.
La iglesia, a pesar de su extraordinaria belleza no está acondicionado para su visita (2013) y su lamentable abandono hace que se comience a caerse a pedazos y que la vegetación comience a devorarlo.
Pero eso no es toda la obra de esta grandísima y luchadora persona conocida como el Padre Eyre. Junto a la iglesia construyó un gran edificio acondicionado como residencia para personas minusválidas. Posteriormente tuvo otros usos que harían que en el futuro quedara semi derruido y abandonado convirtiéndose hoy en un basurero y en una gran escombrera que amenaza derrumbe.
El Padre Eyre murió en el año 2002, con más de 90 años de edad. Es una pena que una persona trabajadora y luchadora no pudiera ver sus grandes sueños hechos realidad y más verlos arruinarse y derrumbarse con sus propios ojos.
Hola! Sabeis si actualmente se puede entrar?
Hola! No creo que haya cambiado mucho la cosa. Aunque la verdad es que no te lo puedo afirmar.
A día de hoxe (agosto de 2022), a contorna está máis limpa do que indican as fotos, e o templo está aberto (ao entrar eu agardabao más ruinoso e con medo de atoparme algo ou alguén, pero a verdade que bastante ben todo).
A cuberta (o teito) empeza a sofrir roturas no interior, pero non parece perigoso.
É impresionante. Mágoa que estea abandoado.
Grazas polo comentario e a situación actual. Así é, cando queiran darlle valor terán que gastarse millóns en arranxar o que se está a perder. Un saúdo.