En San Cibrao, Cervo, en la parroquia de Santa María de Lieiro, existe una península que no hace mucho era una isla pero que hoy se encuentra unida a tierra firme por un pequeño arenal de 150 m de largo y poco más de 100 metros de ancho. Así se forma la conocida como Punta Atalaia o Punta de San Cibrao, que tiene una altura máxima de 34 metros que es donde se ubica el faro actual. Existen en el lugar dos faros de diferentes épocas.
El primero que cuenta con un pequeño edificio-vivienda es el más antiguo y data de 1860. El moderno es ya de 1979 y la luz se encuentra a una altura de 14 m sobre el suelo. La punta en donde se ubica el faro se conoce también como Punta Atalaia. La palabra «atalaia» (atalaya) denota la existencia de una instalación existente en el siglo XVIII desde donde se vigilaba el mar de posibles ataques de ingleses u holandeses, que castigaban nuestras costas en aquel siglo. Cerca de los faros existe un moderno mirador de hierro y cristal y cerca también tenemos un parque infantil y un área recreativa.
Existen también en los alrededores los restos de dos fábricas de salazón. Los restos de una de ellas se denominan Castillo Marino y están junto al puerto pesquero en el que antaño (s.XIV-XV) se construían carabelas. desde este cabo veremos las islas conocidas como Os Farallóns (Baixa, Sombriza y Pe), el puerto deportivo que es protegido por una escollera y un rompeolas que se llama Anxuela. Cerca del cabo están las hermosas playas de Torno, Cubelas y A Caosa. A menos de dos kilómetros se ubican las instalaciones de la gran fábrica de aluminio de Alcoa que forma ya parte del paisaje litoral de San Cibrao.
Alrededor de este lugar existe la leyenda conocida como de A Maruxaina, ser mitológico gallego mitad mujer, mitad pez (sirena) que moraba en una cueva conocida como de Xan Vello en la Illa da Sombriza. Sin embargo existen diferentes versiones y algunas veces es vista como un ser maligno que atraía con su belleza y hermosos cánticos a los navegantes y otras veces se dice que avisaba de la proximidad de los temporales. En honor a la Maruxaina existe una escultura en la playa de O Torno.