«Areal dos Botiños«, este el verdadero nombre de la pequeña cala que nos ocupa en este post. Un «botiño» en gallego hace referencia a un delfín mular, especie muy característica de las costas gallegas.
En Mendocino, California, Ussuri en Rusia, el Bigaral en Asturias o incluso en Viveiro y existen playas repletas de cristales erosionados. Estos son solo algunos ejemplos, pues repartidas por el mundo existen varios casos más y todos relacionados con la actividad humana. La Playa de los Cristales de Laxe es otro ejemplo de ello. Esta pequeña cala se ubica en la parte oeste de Cabo de Laxe junto a una ensenada denomina Baleeira. Allí se localiza el cementerio de Laxe y justo desde él sale un camino rehabilitado que llega a la pequeña playa que se encuentra a unos metros del camposanto.
La formación de esta playa de los cristales y de otras similares se debe como dijimos a la acción humana y no precisamente a su amor por la naturaleza. El uso incontrolado de un lugar próximo como vertedero en donde abundaban las botellas de cristal provocó que la acción del mar esparciera miles de trocitos de cristal que con el paso del tiempo quedaron erosionados y depositados sobre la cala dándole el suave aspecto actual. Sabemos que el vertedero estuvo en la zona hasta ya entrado el siglo XXI, un poco antes del 2005, cuando con las obras de acondicionamiento de la zona la Xunta invirtió 140.000 € para su clausura y retiró gran parte de los cristales ya depositados en la playa interpretando que estos formaban parte de la basura. Tres meses después se paró la limpieza y se conservó el aspecto de esta cala.
La playa vale como curiosidad pero nos quedamos con la ubicación y con la costa del cabo y alrededores. Sin dudarlo Laxe alberga una infinidad de sitios y paisajes que nos llamaron mucho más la atención por su belleza e historia. Sin ir más lejos muy cerca está Punta Ínsua y el faro de Laxe, un lugar para conocer.
Desde el cementerio sale un sendero que conduce durante 400 metros a la conocida Pedra dos Enamorados, una roca con inscripciones románticas labradas en la misma piedra. Como siempre, la sin razón provoca que muchos escriban palabras con sprays y similares.
En Baiona también tenemos otra playa de características muy similares, la playa de los cristales de Cabo Silleiro.
bueno,que vou dicir,nada por riba teremos que estar agradecidos que non haxa plasticos