La ría de Ferrol se estrecha a la altura de la Punta da Redonda formando un estrecho paso de menos de 600 metros de anchura. Se aprovechó este accidente geográfico para la colocación de tres fortalezas con el fin de impedir la entrada a buques enemigos. Una de ellas es el gran castillo de San Felipe. Al frente se situaron la fortaleza de San Martín y el castillo de A Palma. El primero de ellos servía de anclaje con San Felipe para las cadenas que cerraban la ría en caso de ataque por mar.
Estas tres fortalezas formaban el denominado «Triángulo de Fogo», ya que no había esquina donde los cañones no llegaran con su fuego. El que nos ocupa, el Castelo da Palma, fue construido como una atalaya ya en el siglo XVI. Se le conocía originalmente como Castillo de Nuestra Señora de La Palma y se sabe que en 1597 fue finalizada. Un año antes ya sirvió de defensa ante el ataque de la escuadra inglesa de Esex y Howard quienes fueron repelidos. También se sabe que hacia el año 1656 se describe la situación de los tres castillos como «de lamentable abandono».
En el siglo XVIII comenzó su transformación hacia un gran baluarte defensivo y estratégico para la defensa de la ría. Comienza su reconstrucción en el año 1731 bajo la dirección del ingeniero militar La Ferriere y después de su sucesor Juan Vergel. Posteriormente hubo varios proyectos de ampliación y reforma en los años 1775 y 1792.
En el siglo XIX (1809) la ría de Ferrol sufrió el ataque de las tropas francesas con el motivo de «limpiar la zona» y tomar los castillos que defendían la ría.
Actualmente se conserva un edificio monumental fruto de la última reconstrucción acaecida a finales del XIX y a principios del siglo XX. En el año 1940 también se acometieron reformas para la creación de varias dependencias como habitaciones y salas de estar.
Su último uso antes de su abandono fue como cárcel para jefes militares y oficiales del ejército. En 1981 acogió como preso a Antonio Tejero Molina, autor del intento del golpe de estado de España del 23 de febrero de 1981.
Actualmente (2015) se encuentra en ruinas a pesar de que ha sido comprado a principios del siglo XXI por una cadena hotelera. Sin embargo el uso del suelo impidió su restauración como hotel. Parece ser que en la segunda década se ha conseguido la recalificación del suelo como uso residencial con lo que el castillo podrá tener un futuro mejor.
El castillo de A Palma fue declarado BIC en 1945.
Pero si lo que queréis es saberlo todo sobre su construcción y transformación así como fotos de su interior no dudéis en leer este estudio de Rebeca Blanco Rotea titulado «El castillo de La Palma (Mugardos, A Coruña). Un enclave defensivo en la Ría de Ferrol.» , o este otro estudio de Carolina Martínez Vila en «Evolución y transformación del castillo de la Palma en la Ría de Ferrol: Reposición Gráfica y Volumétrica.»
HEMOS VISITADO HOY EL CASTILLO Y NOS ENCANTO. CREO QUE VOLVERE PARA VER ALGUNA COSA QUE HOY QUEDO SIN VER.