Nuestro último viaje ha sido enriquecedor, no por el paisaje porque como todos sabréis As Neves fue el «Kilómetro 0» de los incendios en Galicia, y el panorama de sus montes es lastimoso pero hemos descubierto el mejor museo al aire libre de arte rupestre, con estos fantásticos Petroglifos.

Todos conocemos por noticias que la devastación en este concello fue de un 90% pero contemplar el paisaje con tus propios ojos es un pies en ceniza del que todos escapamos, una verdadera pesadilla para el corazón del que ama Galicia. Os aseguro que por más que lo visitamos la sensación al llegar es parecida a la que sufrimos con los incendios, ese nudo en el estomago, esa rabia contenida pero seguiremos apostando por este gran concello vecino que pronto lucirá mucho mejor que antes, curaremos este mal entre todos y Galicia lucirá si cabe aún más hermosa.

Mis hijos sintieron en su alma la acción de las terribles lapas que arrasaron todo a su paso, un escenario en el que los verdes pintan solo el camino y nos enseñan la importancia de lo que nos falta, la importancia de valorar el monte, de protegerlo y de cuidarlo.

Os diré que se quedaron bastante impactados al llegar, acostumbrados siempre a nuestros mejores verdes pero no han de ser nuestros hijos ajenos a una realidad que nuestra tierra sufre año tras año y contemplarlo te da una perspectiva diferente a sentirlo en la distancia.

Los sitios se recuperan gracias a las visitas y a los mil ojos que se posan sobre ellos, a la colaboración, a implicarse mostrando como están porque si no se conoce lo que nos rodea, difícil será el sentir lo que le sucede.

En este lugar los incendios han hecho florecer más «petroglifos» un valor añadido que hará que la zona se acondicione mucho antes, de hecho nos sorprendió que ya quedaban pocos árboles quemados, habían sido retirados por este concello que fue un referente en voluntariado y movilización ciudadana, nuestra esperanza en el cambio nos la trae la reforestación de la zona con árboles autóctonas, gracias a la concienciación.

Este gran bien patrimonial «los petroglifos» encontrados hace bien poco, serán todo un referente dotando la zona de gran interés y por eso, hasta aquí nos vinimos para descubrir el mejor hallazgo en los últimos 20 años en Galicia.

En esta zona ya había petroglifos catalogados con anterioridad y estaban señalizados para que todos los disfrutasen siendo los más conocidos:

El juego castrexo

A Serpe preñada

La serpiente embarazada

y los abstractos…

también en toda la zona podréis ver

muchas coviñas o cazoletas en español.

¿Las contamos? 😉 este sería todo un reto

MAPA

Es una zona con mucho que enseñar en lo que a arte rupestre se refiere.

Una vez que hemos disfrutado de los primeros petroglifos al inicio de la ruta, nos disponemos a buscar cual caza recompensas, los estrellas en estos días, hay que tener los ojos bien abiertos y sentir el dónde estarán.

A medida que caminamos nos fijamos que han sido muy visitados últimamente y los caminos trazados por otros, nos pueden dar la mejor de las pista del «dónde estarán»

en este tema hay que ser cuidadosos y observadores, recuerda que no cualquier niño está preparado para iniciarse en este precioso arte.

Nos paramos en todo lo que tiene verde de nombre porque en Galicia siempre el verde busca nuevamente su sitio.

Apreciamos madrigueras de animales y sentimos mucha pena en la incertidumbre del «cual sería su destino», toda la naturaleza sufre con los incendios, y esto nos apenamos muchísimo.

Hoy la niebla parece querer tapar con su presencia lo que tanto daño nos hace a la vista porque muy prontito lo cubre todo su manto.

Con pocos rayos de sol, apreciar los petroglifos es una tarea dura, pero la voluntad del que los busca con ganas y la suerte de un rayo, hace que la magia una vez más nos cuente la mejor de las historias, esa que está escrita en piedra.

Y nos da rienda a imaginar que nos quieren contar a través de los años estos preciosos escritos al alcance del que ama su pasado.

Y como en toda excursión que se precie una gran visita hace que se haga la luz porque por suerte conocimos a dos grandes estudiosos del arte rupestre Pablo Novoa y Xosé Álvarez que aportaron esa luz en la noche para que disfrutarlos se convirtiese en la mejor de las aventuras.

Nos quedamos hasta última hora para aprovechar al máximo el día, mejor dicho ya la noche y mientras nosotros intentábamos descubrir nuevos petroglifos con la ayuda de la luz de los móviles,

otros se concentraban en especular, analizar, postular, fotear y vivir un momento intenso a la luz de un foco,

Un triplete mágico de grandes entendidos que entretenidos no se percataron de que los trasnos siempre encuentran lo que buscan, 😉 un tesoro sin localización, la diversión.