Pasar un día genial, en contacto con la naturaleza e incluso aprender es muy sencillo en nuestro entorno.
El de hoy es uno de los lugares que más nos gusta para disfrutar de un día en cualquier época del año.
Este día decidimos ir a comer allí, justo en la entrada del Parque Natural del Barosa hay una extensión de césped, mesas y un parque infantil donde hicimos nuestra primera parada. Montamos nuestra mesa y comimos tranquilamente, cuando los niños acabaron estuvieron disfrutando del parque un buen rato mientras reposamos la comida y después comenzamos la ruta.
No hace falta mover el coche ya que está todo muy cerca y conectado por senderos.
Así llegamos a la cascada, un entorno tranquilo con aseos y un restaurante donde tomarse un café mientras los peques disfrutan de la cascada y las fuentes, está genial.
A continuación subimos por la ladera de los molinos entrando en cada uno de ellos, aprendiendo cómo funcionan, e identificando sus partes.
Nos sentamos varias veces en el camino a observar el transcurso del río algo impresionante a la vez que relajante.
A los peques les gusta imaginarse que son escaladores y esta zona era ideal para ello mientras la peque nos guía, todos jugábamos a ver quién encontraba más mariposas, pájaros, árboles,…, adivinar la forma de las ramas, es un lugar mágico de verdad, con muchísimas cosas por hacer y disfrutar.
«La familia os desea que disfrutéis de la magia de Galicia. ¡¡Ah!! cuidado que engancha”