Nos acercamos a Monção para descubrir una playa fluvial, un puente y un conjunto arquitectónico en el que una iglesia, fuente y crucero nos alegrarán la vista, y es que lo bueno de estar cerquita de Portugal, es que nada más pones un pie en el país, ya te sientes como en casa y más si te gusta el arte y el patrimonio porque la verdad es que aquí lo cuidan con mucho mimo.
Empezamos la excursión tomando decisiones, aunque elegir el camino cuando vas con niños, aquí está más que claro.
Nos dirigimos a la playa fluvial que aunque estemos en octubre gracias a este verano de San Miguel que disfrutamos, se puede inagurar y si no, pues anotamos para el verano que viene!
Acerquémonos a las señales y al lenguaje que se nos muestra durante todo el viaje en este maravilloso país, Portugal
os recomiendo poner su radio, escuchar, traducir e intentar cantar sus canciones
y así nos sentimos moradores y no foráneos.
Ya se va presentando el Ponte do Mouro que trataremos de encontrar con los niños, nos lo habían recomendado y tenemos ganas de visitarlo, también se anuncian los molinos, una arquitectura tradicional que nos encanta.
Contemplamos la iglesia a lo lejos, pronto la descubriremos
De camino nos encontramos con esta cabeza que cuál guardián parece vigilar nuestros pasos.
Y también nos encontramos con un buzón la mar de curioso
¿rescatamos el escribir cartas?
¿Qué os parece si le mandamos nuestro viaje a quién queramos?
seguro que le hará ilusión recibir nuestra carta y se es acompañada por uno de nuestros dibujos, muchísimo mejor.
Contemos nuestro viaje a otro país
Típicas las calles empedradas, nos encanta recorrerlas
Posiblemente baños y cantina, que nos cuentan que viene mucha gente en época estival, no nos extraña.
PLAYA FLUVIAL PONTE DO MOURO
La playa es una maravilla
Se respira tranquilidad de la naturaleza
Cuerdas para que el chapuzón sea más divertido, un puente para cruzar a la otra orilla
Un río el Mouro, tranquilo y de aguas transparentes
Que deja que cada uno de los acompañantes de su ribera se reflejen en él
Un lugar bonito, bonito que os recomendamos visitar
Ahora toca buscar el puente do Mouro y a lo lejos ya vemos un molino
Mirar para atrás se nos antoja porque cuesta despedirse de lugares así, pero como lo tenemos tan cerca,
volveremos, muy pronto
Un Molino restaurado
Una zona en la que no se puede pescar, ya que es una zona de abrigo de los peces
Seguimos andando y nos encontramos con otro molino con vistas al río esperando su restauración
Aquí está el Ponte do Mouro sobre el que ronda una antigua leyenda.
Perseguido un Mouro por los cristianos pide aquí mismo ayuda a Santiago.
PONTE DO MOURO
Después de contar la leyenda continuamos camino
Subimos por las callejuelas, por el camino del molino
y nos encontramos con la calle del tunel
Seguimos para cruzar el puente, Ponte do Mouro, con marcadas huellas del pasado en su calzada,
no sin antes disfrutar del paisaje a sus pies
Encajonado el río Mouro por un lado
y arropado por la naturaleza por el otro, nos lo imaginamos con mucha más agua,
habrá que volver
Y cruzamos y nos encanta la arquitectura de las casas
Y en una ventana una cruz Santa que nos indica que está cerca la iglesia,
probablemente sea la casa parroquial
Ahí está comenzamos a descubrirlo todo
Un peto antiguo y muy bien conservado
Y la majestuosa iglesia dedicada a San Félix
CAPILLA DE SAN FELIX
Una fuente del S.XVIII con mitad serpiente y pez presidiéndola
Un cruceiro policromado con una puerta pintada
que despierta nuestra curiosidad
Oratório de Santo Cristo / Oratório do Senhor da Boa Morte
¿A quién no le gusta, una obra de arte así?
Y si eres muy observador verás que algunos han hecho de ella su casa
Un lugar con mesas en el que comer o merendar, un espacio tranquilo y con la playa fluvial al lado
Nos despedimos de la iglesia y su conjunto desde un puente que hay justo al lado,
Ponte Nova
Nos despedimos también del Ponte do Mouro
Nos despedimos de un lugar con mucha historia
Y prometemos volver en otra estación para contemplar sus cambios