En la parte alta de Baiona se encuentra el barrio de la Santísima Trinidade. Es en este lugar donde en el siglo XV se instaló un hermoso cruceiro gótico con la figuras de Cristo y la Virgen y unas figuras policromadas a los pies de la Dolorosa, la Magdalena y el Apóstol Santiago. Pero no es sólo la hermosura del cruceiro lo que lo hace único sino que posteriormente fue cubierto con un baldaquino renacentista de origen francés. Un pequeño altar compuesto por una losa de granito junto al cruceiro servía para realizar las misas para los navegantes que fondeaban y se resguardaban en la bahía de Baiona. Por este lugar circulaba la calzada romana que se conoció como Estrada Real y recorría desde Ramallosa hasta A Guarda, pasando por toda la costa de Oia junto al monasterio de Santa María.