El concello de Vilaboa mantiene uno de los hórreos más grandes de Galicia en San Martiño, no por su longitud sino por su capacidad. Para ello, el hórreo es sostenido por doce grupos de tres pies que conforman un total de 36.
El canastro actualmente pertenece a la iglesia y ha sido restaurado en el año 2014 ya que hasta este año se mantenía abandonado y en riesgo de derrumbe.
Este gran hórreo fue posiblemente construido en el siglo XVIII y está formado íntegramente por granito con una cantería exquisita. Su cubrición es a base de teja del país a dos aguas. Destaca la cornisa que rodea todo el conjunto. Forma parte del conjunto que forma la iglesia y la Rectoral de San Martiño.
Estado del hórreo de Vilaboa antes del año 2014: Ver aquí.