El castillo o fortaleza de Amarante se localiza en el lugar de Amarante, en el concello Antas de Ulla.
Este topónimo gallego ligado a una familia noble da nombre a cuatro de las parroquias del concello: San Fiz de Amarante, San Martiño de Amarante, Santa Mariña do Castro de Amarante y Santo Estevo do Castro de Amarante. Sin embargo, solo existe un lugar de «Amarante» en todo el municipio y que está en la última parroquia nombrada anteriormente.
Aquí se originó la casa de Amarante, probablemente hacia el siglo XIII, posible siglo de construcción del castillo en la llamada «tierra de Reboredo». No obstante, los primeros señores de los que hay noticias son los Noguerol y no sería hasta finales del siglo XV. Se trataba de una familia de caballeros y escuderos con una gran posición social y económica. Estos prestaban servicios a otras familias poderosas, como los Andrade, e incluso a los reyes castellanos. Muchos de los señores de Amarante participaron en conflictos militares de la época en diversos hábitos.. De esta forma, en el año 1648 recibirán el título de Condes de Amarante.
Si queréis saber mucho más de la historia de la Casa de Amarante, os dejamos este trabajo de la Universidade de Santiago de Compostela escrito por Anastasio Santos Iglesias Blanco. La Casa de Amarante, siglos XVI-XIX.
La familia de los Amarante se relacionan como protectores del monasterio de Vilar de Donas, que hoy conserva una fabulosa iglesia románica. Varios enterramientos del templo pertenecen a familiares de la casa.
Dicen que esta fortaleza está levantada sobre un yacimiento castrexo, aunque de esto no encontramos confirmación e incluso el Plan Básico Autonómico no hace referencia a él. No cuenta con grandes defensas naturales, a excepción del Rego de Santa Mariña hacia el lado sur que forma una ladera de cierta inclinación. Debemos saber que 800 metros al oeste se localiza la iglesia parroquial de Santo Estevo do Castro de Amarante que se asienta sobre un poblado castrexo denominado Castro da Orela.
En la configuración de la fortaleza sobresale un recinto ovalado compuesto por grandes y robustos muros que nos recuerdan a los primitivos castillos de los siglos X u XI. Posteriormente se le añadió una torre y sufrió grandes cambios, incluso sucumbió a la furia de los Irmandiños. Lo reconstruyó el mismo Roi Fernández de Noguerol. Otras fuentes nos cuentan que fue Luis de Mudarra bajo órdenes de los mismos Reyes Católicos quién derribó el castillo en la época de la revuelta.
Siglos después también se construyó formando parte de la fortaleza el Pazo de Castro de Amarante que no debemos confundir con el Pazo de Santa Mariña de Amarante, también llamado Pazo de Torrepenela.
Ya en el siglo XX, la construcción medieval fue habilitada hasta el año 1961 como cuartel de la Guardia Civil. A principios de siglo XXI la fortaleza se adecuó para su uso para la celebración de eventos y congresos, pero apenas tuvo actividad. En la actualidad (abril 2024), el castillo de Amarante pertenece a una de las herederas de Carmela Arias, la Condesa de Fenosa y se encuentra a la venta por un precio de 1.050.000 €.
Daros un paseo por la pequeña aldea de Amarante y no quitéis los ojos de las paredes y muros ya que os llevaréis algunas sorpresas. Como muchas otras fortalezas y castros en Galicia, existe una leyenda sobre la existencia de unos túneles que conectaban con Monte Farelo.
La fortaleza está protegida por el Decreto de 22 de abril de 1949 sobre protección de los castillos españoles. También se encuentra catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC).
Bibliografía
- Galicia Pueblo a Pueblo
- Anastasio Santos Iglesias Blanco. La Casa de Amarante, siglos XVI-XIX.
- Enciclopedia de los Monumentos de España.
