La playa de As Furnas se encuentra en Porto do Son y es un areanal de arena blanca y fina. Aunque salvaje y virgen es un maravilloso lugar en el que evadirse en cualquier epoca del año. Es paraíso para los amantes de deportes naúticos como el surf. A parte de tomar el sol, darte un buen baño en el mar o hacer deportes, dispone de una piscina natural formada por las rocas pizarrosas y también muy cerca puedes darte un paseo hasta la Lagoas de Xuño y San Pedro de Muro ya en la playa de Area Longas.
Aunque algo ventosa es ideal para los que escapan de las aglomeraciones de las playas y quieran disfrutar de la tranquilidad.
En esta playa desemboca el Río Sieira que es cruzado casi junto a la playa de los restos de un puente medieval. Muy cerca está también la playa de Baroña, donde se encuentra uno de los castros más conocidos de Galicia.
Hay quien afirma que es una de las mejores playas de este litoral, aunque muchos no quieren darle este galardón ya que en sus Furnas tuvo su accidente el conocido Ramón Sampedro, el primer español que reivindicó públicamente el derecho a disponer de su vida o, si se prefiere, el derecho a morir dignamente.
Imprudencias las hay en todas las playas, al igual que accidentes pero la playa en sí no es culpable de nuestros infortunios, ni actos, desde aquí no queremos desmerecer una playa que defendió esta persona durante toda su vida, de ella guardaba gratos recuerdos de niñez y de juventud, postrado en su cama añoraba el pasear por ella, impedido de una tetraplejia jamás culpó a la misma de su accidente.
En la playa de As Furnas se le rinde Homenaje a este hombre que en plenas facultades defendió durante su vida el derecho a la eutanasia. .
Su decisión de como el decía acabar con su pesadilla particular hizo que se escribiese un libro y más tarde fuese Javier Barden en Mar Adentro quien interpretase a un hombre que no quiso vivir encerrado en un cuerpo, como él decía una cabeza viva encerrada en un cuerpo muerto lo que para él significaba una tortura.
Ramón respeto siempre y se enorgullecía de todos aquellos que luchaban por seguir con su vida día a día, pero también pidió el respeto a su derecho de elegir lo que hacer con la suya, negado en España puso fin a su sufrimiento en su piso en Boiro.
Abrió un debate en favor de la eutanasia hoy en día su lucha sigue esperando a que desde como el decía «donde esté» sea satisfactoria para quien desea terminar con su sufrimiento.