La aldea vella de Vichocuntín

Somos muchos los que creemos que el patrimonio gallego debe ser protegido, valorado y conservado para disfrute de las siguientes generaciones que verán en sus raíces el cimiento de su vida futura.

Lejos de las rutas conocidas, carente de valor inminente, desprovisto de credenciales, sin merchandising, son pocos las que ven en las ruinas grandes obras de arte en la naturaleza. Es el caso de Vichocuntín, su abandono se divaga entre razones de nuevas carreteras o quizás la muerte de sus últimos habitantes, fue sin duda el desarraigo o el abandono, el peor de los enemigos del rural y el inicio de su gran deterioro.

Cuantas historias nos contarían las lareiras de estas aldeas, cuanta gente se saludaría desde sus balconadas. Los molinos centros de reunión, los palomares disfrute de los ojos, el rebumbio de una aldea se ha quedado en silencio roto, sólo la naturaleza egoísta lo cubre para sí y en medio del entorno nace nuestro mejor propósito, «dar a conocer la historia de un gran pueblo», sus inicios, su día a día, su gran amor al trabajo bien hecho y a la tierra que les vio nacer.

Aquí en esta aldea las piedras conforman como un gran tetris hogares, hoy ya abandonados, esperando su puesta en valor, siguen buscando revaloración o quizás simplemente limpieza y acceso para no ser olvidados. En ellas la cantería espera su premio, tú estimable visita.
Hoy en día son muchos los que apuestan por la vida sana, viendo en los bosques gallegos un gran pulmón en los que el desconectarse de la rutina diaria y acercarse a la naturaleza es una realidad. Y es que sin lugar a dudas, hay lugares en los que es sencillo respirar tranquilidad y no hay más que dejarse llevar por el sonido del río o por el canto de los pájaros para sentir la verdadera esencia gallega.
Paraísos naturales que esperan a que tú te decidas a ayudarlos, simplemente valorandolos, nada más sencillo que visitándolos.

Hay lugares en Galicia a los que altruistamente unos pocos dan valor, y desde aquí nuestras más sinceras felicitaciones y gran agradecimiento.
Gracias Capitán Gosende porque con gente como vosotros Galicia se siente cuidada.

Más información sobre la «Aldea Vella de Vichocuntín» en Galicia Máxica.